El presidente de Bolivia, Luis Arce, cambió sorpresivamente a la cúpula militar del país el fin de semana e instó a los nuevos jefes a garantizar el restablecimiento del orden público frente a los bloqueos carreteros de seguidores del exmandatario Evo Morales que ya llevan dos semanas.
«El derecho a la protesta pacífica está garantizado», pero cuando éste «vulnera los derechos colectivos de terceras personas, como la libertad de locomoción y la libertad de circulación en todo el territorio nacional» se genera «una grave conflictividad en el país», dijo el mandatario la noche del sábado al presentar la cúpula militar en la sede del gobierno en La Paz.
«En la coyuntura actual, la sociedad nos demanda de manera imperativa al gobierno y a las fuerzas armadas (…) preservar los más altos intereses del país como la seguridad del Estado y el restablecimiento del orden público», afirmó Arce.
El cambio militar ocurre en medio de bloqueos de carreteras impulsados por simpatizantes de Morales. La protesta ha generado choques entre policías y campesinos que el viernes dejaron 14 agentes heridos y 44 civiles detenidos.
Grupos campesinos empezaron los bloqueos el 14 de octubre para exigir el «cese de la persecución judicial» contra Morales, investigado por un presunto abuso a una menor de edad cuando era mandatario.
El gobierno desplegó más de 1.700 efectivos policiales y 113 vehículos para recuperar las vías.
Morales, que defiende su inocencia, advirtió el sábado que los bloqueos continuarán.
«El pueblo sano y honesto no se vende, ni se rinde. Esta lucha (bloqueos y protestas) va a seguir, el pueblo no se rinde», dijo Morales a la radio Kawsachun Coca.
El Ministerio de Relaciones Exteriores denunció el sábado en un comunicado que están «en curso una serie de acciones desestabilizadoras lideradas por Morales que pretenden interrumpir el orden democrático», lo cual amenaza la estabilidad de Bolivia y de la región.
«El Estado de Bolivia hace un llamado a comunidad internacional, a los Estados, organismos multilaterales y pueblos de mundo permanecer atentos ante estos hechos», indicó la cancillería.
Según un reporte de la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC), en el país se registran 16 puntos de bloqueos, la mayoría en el departamento de Cochabamba, bastión de Morales.
Los cortes han acentuado la escasez de combustibles y han disparado los precios de los productos básicos.
Según el ministerio de Desarrollo Productivo y Economía Plural, ya han causado pérdidas de casi de 1.200 millones de dólares.
Con información de AFP