La Organización Mundial de la Salud (OMS), en colaboración con socios como GAVI o el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF), distribuirá 900.000 dosis de vacuna contra la mpox (viruela símica) en nueve países africanos afectados por el actual brote, del que se han registrado más de 48.000 casos y 1.048 muertes en 2024.
Esta partida es el primer resultado de la creación el pasado mes de un mecanismo de distribución de vacunas cuyo objetivo es llevar seis millones de dosis al continente antes de finales del año, indicó en rueda de prensa el director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus.
«Los países están siendo informados hoy de las asignaciones» de dosis, indicó Tedros, quien señaló que más adelante se detallará que naciones son las primeras beneficiadas.
Las vacunas han sido donadas por Estados Unidos, Canadá, la Unión Europea y 12 países miembros de ésta, y son según Tedros «un importante paso para controlar la mpox», enfermedad por cuyo brote en África la OMS declaró nuevamente una emergencia sanitaria internacional el pasado mes de agosto.
El experto etíope recalcó que la vacunación sólo es una de las muchas armas para combatir el brote, siendo otra muy importante la realización de pruebas para confirmar la presencia del virus en casos sospechosos.
En este sentido, recordó que en la República Democrática del Congo (RDC), uno de los países más afectados, sólo se han podido testar entre un 40 y un 50 por ciento de los casos sospechosos.
En RDC y la vecina Ruanda ya han iniciado campañas de vacunación en las que se ha inoculado a unas 50.000 personas, destacó Tedros este viernes.
La alarma de la OMS por la mpox se debe a la rápida expansión y alta mortalidad en África de su nueva variante (clado Ib), diferente de la que causó en 2022 un violento brote en África, así como cientos de casos en Europa, Norteamérica y países de otras regiones.
Aquella variante menos letal ya llevó a una primera declaración de la emergencia sanitaria internacional entre 2022 y 2023. EFE