La líder de la oposición venezolana, María Corina Machado, aboga por una mayor presión nacional e internacional en contra del régimen de Nicolás Maduro para hacer valer la voluntad popular, que el pasado 28 de julio eligió al diplomático Edmundo González como presidente constitucional para el período 2025-2031.
En una entrevista en la televisión argentina Todo Noticias, la líder política denunció que lo que vive actualmente el país es la pretensión del régimen de «imponer un Estado total de terror», en el cual nadie se atreve a hablar, «ni periodistas, ni siquiera los que se han ido porque tienen familia» en Venezuela.
«Han perseguido a sacerdotes por el solo hecho de haber oficiado misas por los presos políticos.68 niños que están hoy presos, que fueron torturados. Las madres y ellos mismos han denunciado que tenían quemaduras, que les aplicaron electricidad, que los golpearon, obligándolos a grabar audios o videos inculpándome a mí o a Edmundo, o acusándose ellos mismos de haber cometido crímenes que no cometieron», aseveró.
En medio de este escenario, la líder opositora aseguró que la oposición ha ido avanzando en su estrategia política durante más de un año, cuando aún no se tenía un candidato definido. Ahora, destacó, corresponde hacer valer la soberanía popular, expresada por más de siete millones de venezolanos, que votaron por González Urrutia en las pasadas elecciones presidenciales.
«Hay que aumentar toda la presión, desde adentro y desde afuera, para que Maduro entienda que es su mejor opción una transición negociada y que no es sostenible este sistema con todo lo que ha pasado», precisó.
Ante el proceso judicial que adelanta Argentina en contra de los jerarcas del régimen por violaciones de derechos humanos, Machado consideró que la comunidad internacional, incluida la Corte Penal Internacional (CPI),que investiga crímenes de lesa humanidad cometidos en Venezuela desde 2014, debe elevar el costo al régimen de Maduro.
En su opinión, las instancias internacionales deben hacerle «más difícil cada día» su permanencia, a «sangre y fuego», en el poder.
«Una de las formas fundamentales, a través de la justicia internacional, a aquellos que cometen crímenes de lesa humanidad, como lo ha denunciado las propias Naciones Unidas, tienen que saber que van a enfrentar la justicia«, subrayó.
Asimismo, consideró que la justicia internacional también debe «aplicarse» para ponerle fin a uno de los pilares de la dictadura venezolana, que es «el dinero que viene por actividades ilícitas narcotráfico, tráfico de oro, incluso tráfico de seres humanos».