Kamala Harris, vicepresidenta de EEUU, anunció este domingo que votó por correo para las elecciones presidenciales que se celebran este martes en Estados Unidos y para las cuales compite como candidata demócrata contra el ex mandatario Donald Trump en la carrera por la Casa Blanca
“De hecho, acabo de completar mi papeleta de voto por correo”, dijo la candidata demócrata a la presidencia a los periodistas mientras hacía campaña en el estado clave de Michigan, y agregó que la papeleta estaba “en camino a California”.
Mientras tanto, Harris y Trump emprendieron este fin de semana un frenético recorrido por un puñado de estados muy disputados en busca del voto de los indecisos.
La vicepresidenta y su rival, el candidato republicano, siguen en empate técnico en las encuestas.
Ambos partidos políticos dirigen sus esfuerzos a los estados clave, aquellos territorios donde las elecciones suelen decidirse por un estrecho margen. Estos estados juegan un papel crucial en la definición del ganador, en contraste con los estados considerados bastiones firmes de los republicanos o demócratas, donde el apoyo hacia un partido específico es históricamente consistente y predecible.
En estos estados, las campañas se intensifican con estrategias que buscan captar el apoyo de votantes indecisos o fluctuantes, conscientes de que las elecciones pueden inclinarse hacia uno u otro candidato por una diferencia mínima de votos. Este enfoque es fundamental, ya que asegurar el triunfo en estos territorios define el resultado general de los comicios presidenciales.
Donald Trump es una “amenaza para la democracia estadounidense”, insistirá la ex senadora en sus mítines en Georgia, Carolina del Norte y Michigan, según informaron fuentes cercanas a su campaña. La política, que busca ser la primera mujer en asumir la presidencia del país, ha diseñado su gira para destacar este mensaje en momentos clave de su campaña.
Si se analizan los resultados de los cara a cara que tienen en cuenta a los candidatos de terceros partidos, las encuestas indican que Harris y Trump están empatados en Georgia (46 % cada uno), Michigan (45 % cada uno) y Pensilvania (47 % cada uno) entre los posibles votantes de esos estados, que en conjunto valen 50 votos electorales en las elecciones del martes.
Harris tiene el 48 % frente al 45 % de Trump tanto en Wisconsin como en Carolina del Norte, y el 48 % frente al 46 % de Trump en Nevada, brechas que están dentro del margen de error de cada encuesta que sugieren que no hay un líder claro.
Mientras que Trump lidera por un estrecho margen en Arizona, con un 48 % frente al 44 % de Harris.
Los enfrentamientos directos entre ambos -sin tener en cuenta a otros candidatos- indican un panorama similar, con solo la ventaja de Trump en Arizona fuera del margen de error.
Una encuesta del New York Times/Siena College, indica que los votantes que deciden tarde en estos estados pueden estar inclinándose por Harris. Según The Times, el 8 % de los votantes que decidieron su voto en los últimos días o semanas se divide en un 55 % para Harris y un 44 % para Trump.