La educación intercultural bilingüe en Venezuela se ha visto afectada, según un informe de la ONG Fundaredes difundido este miércoles, por el «deterioro» de las escuelas dispuestas para este fin y por otros problemas económicos y sociales.
«Las comunidades indígenas enfrentan una crisis educativa que perpetúa la desigualdad, vulnera derechos fundamentales y pone en riesgo la preservación de sus culturas», dice el escrito, en el que se señala que estos grupos étnicos representan el 2,8 % de la población total de Venezuela, distribuidos principalmente en los estados Bolívar, Zulia, Amazonas y Delta Amacuro.
Con base en entrevistas, la ONG alerta sobre una «preocupante decadencia» de la educación en los pueblos originarios, atribuida a causas como la falta de recursos y la discriminación, ocasionando una «pérdida de la identidad cultural y marginación» para niños y jóvenes que viven en estas comunidades, muchas de ellas ubicadas en zonas remotas.
«El Estado ha fallado en garantizar su derecho a una educación de calidad, culturalmente relevante y accesible», subraya el informe, en el que, a modo de ejemplo, se cita el caso de Delta Amacuro, donde «8 de cada 10 escuelas no operan, y en las que lo hacen, los niños asisten a instituciones sin mobiliario adecuado, sentados en el suelo o en bancos improvisados».
A esto se suma -prosigue Fundaredes- la escasez de docentes capacitados en educación intercultural y bilingüe, lo que restringe aún más la capacidad para cumplir con la garantía constitucional que obliga al Estado a proveer el traspaso de conocimientos ancestrales en estas poblaciones.
Otro de los ejemplos expuestos por la organización es el de unos 2.500 niños indígenas en Amazonas, que «deben cruzar el río Orinoco para recibir educación en Colombia, exponiéndose a riesgos graves», ante la ausencia de una escuela operativa en el lado venezolano de esa zona fronteriza.
Ante ello, la ONG llamó al Gobierno a priorizar la inversión en infraestructura y en la capacitación de docentes en enfoques interculturales y bilingües, así como a «garantizar el acceso equitativo a una educación de calidad, que respete y valore la diversidad cultural de los pueblos indígenas». EFE