Pese a los esfuerzos por convencer a Donald Trump de que haga las paces con Nicolás Maduro, las personas escogidas para formar parte de su gabinete son una señal de que la nueva administración retomará la política de ‘máxima presión’ contra la dictadura venezolana, pronosticó el viernes un experto clave que asesoró al equipo del presidente electo durante su primer mandato.
“Muy rápidamente después de (la inauguración) vamos a ver una ola de sanciones introducidas por el equipo de Trump que van a ser mucho más fuertes que las adoptadas bajo el presidente Biden”, dijo el profesor Evan Ellis, quien formó parte del equipo que brindó asesoramiento sobre Venezuela al ex Secretario de Estado Mike Pompeo.
Las personas que van a rodear a Trump en la conducción de su política exterior son todos de línea dura con un amplio conocimiento sobre los peligros para la seguridad hemisférica que representan los regímenes de Cuba, Venezuela y Nicaragua, dijo Ellis en un foro virtual organizado por la organización de venezolanos Veneamerica.
De particular importancia es la designación de Marco Rubio como Secretario de Estado. El Senador de Florida ha hecho toda su carrera política denunciando las violaciones a los derechos humanos cometidos por las autoridades de Cuba y Venezuela, y más recientemente las actividades criminales protagonizadas por las máximas figuras del régimen chavista.
Ellis formuló los comentarios en medio de reportes de prensa dando a conocer los esfuerzos de ejecutivos petroleros e inversionistas en bonos por convencer a Trump de que lo más conveniente es llegar a un entendimiento con el régimen de Caracas.
Según un reportaje publicado por el Wall Street Journal, los empresarios sugieren que Washington mantenga abierto el mercado estadounidense de crudo al país sudamericano a cambio de que Maduro detenga el éxodo de venezolanos que en los últimos años ha inundado a los países del hemisferio incluyendo a Estados Unidos.
Ellis dijo que no se puede descartar que un arreglo con esas características pueda ser alcanzado, particularmente en vista de que la principal prioridad de Trump es deportar millones de migrantes ilegales que se encuentran dentro de Estados Unidos, entre los que se encuentran cientos de miles de venezolanos.
Pero enfatizó que las probabilidades son bajas de que eso suceda.
“Si, hay ciertas personas con interés en transacciones de petróleo que le están diciendo a Trump, que debemos levantar las sanciones, son un pequeño grupo de personas que van a jugar golf con él en Mar-a-Lago, y que le susurran eso en el oído”, dijo Ellis.
Pero las personas que están rodeando a Trump y a quienes el presidente electo escucha están muy claros en el error que significa pactar con Maduro, dijo.
Estas personas incluyen a veteranos de la política del estado de Florida, como Rubio y el gobernador Ron DeSantis y a otros políticos de línea dura como Mike Waltz, que entienden la necesidad de mostrar firmeza hacia las dictaduras de la región, expresó.
Ante este escenario, “yo admito que hay una posibilidad de que se realice una negociación, no la descarto. Pero si tuviese que apostar mi propia plata, yo la apostaría en que se va a adoptar una política de mano dura”, indicó.
Agregó que los eventuales nombramientos de Rubio, el de Carlos Trujillo, como Subsecretario de Estado adjunto para Asuntos del Hemisferio Occidental del Departamento de Estado y de Mike Waltz, como Asesor de Seguridad Nacional posiciona a Estados Unidos para adoptar una política exterior mucho más atenta a los acontecimientos de América Latina que la que ha tenido el país en las administraciones pasadas.
Esto se debe a que los integrantes de este nuevo equipo han estado siguiendo de cerca en los últimos años no solo la incursión de Venezuela en actividades ilegales como el narcotráfico y el contrabando de oro, sino que está al tanto de las crecientes alianzas estratégicas alcanzadas por los países de la región con naciones hostiles como China, Rusia e Irán, y sus agrupaciones proxies, como Hezbolá.
“En cierta forma, Venezuela ha sido el anfitrión clave de las amenazas que estos actores extra hemisféricos representen en la región”, manifestó antes de añadir que a esos alarmantes nexos también hay que agregar los vínculos del régimen venezolano con agrupaciones narcoguerrilleras de Colombia, como las FARC y el ELN.
Con información de El Nuevo Heraldista