Este miércoles 11 de diciembre, los eurodiputados de Vox, Hermann Tertsch y Jorge Buxadé, increparon a José Luis Rodríguez Zapatero, expresidente del Gobierno de España, en un foro realizado en la Eurocámara.
Los parlamentarios se acercaron al exejecutivo español en Bruselas, a quien acusaron de ser la “mano derecha” del dictador venezolano Nicolás Maduro, durante un evento sobre la violencia contra la mujer en el que participaba.
Ambos dirigentes políticos portaban un cartel en el que se podía leer: “colaborador y amigo del narcoasesino de Maduro”.
Además, recordaron que mientras Zapatero puede acudir a foros como este, la líder opositora venezolana María Corina Machado no pudo viajar a Estrasburgo (Francia) para recoger la próxima semana el premio Sajarov a la libertad de conciencia que le ha sido concedido de manera compartida con Edmundo González, por el asedio que imparte el régimen de Maduro.
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Tras lo ocurrido, la seguridad del evento acompañó a Zapatero hacia la salida y, una vez el expresidente había abandonado la zona, se escucharon gritos de “asesino” y “200 muertos para llegar al poder”.
Analistas políticos sostienen que Zapatero ha sido uno de los principales encargados de “lavarle la cara al régimen madurista”.
Como se recordará Venezuela atraviesa una crisis humanitaria sin precedentes. Aunque ya son muchos años de dictadura, en las pasadas elecciones presidenciales (28 de julio de 2024) la represión sobre opositores, periodistas y activistas de derechos humanos se ha acentuado.
Dentro de un mes será la toma de posesión en Venezuela. Por un lado, Maduro dice que se pondrá la banda presidencial y por el otro lado, el verdadero ganador de las elecciones, según las actas de dichos comicios, Edmundo González Urrutia, sostiene desde el exilio que ese día reclamará la jefatura de Estado acompañado por el amplio sector que lo respalda.
De hecho, el presidente electo de Venezuela confirmó ante NTN24 que tiene «un plan» para volver al país caribeño y juramentarse.
