El ministro de Relaciones Exteriores de Venezuela, Yvan Gil, acusó este martes al gobierno de Argentina de estar vinculado en un presunto plan terrorista contra Venezuela
y confirmó que el gendarme arrestado en el país la semana pasada “está siendo procesado”.
De acuerdo con Gil, el presidente argentino Javier Milei y su ministra de Seguridad, Patricia Bullrich,, fueron “descubiertos” tratando de “introducir elementos violentos” a Venezuela.
“Han cometido un grave error y han dejado en el camino innumerables pruebas físicas que los comprometen en un plan terrorista”, escribió en sus redes sociales el martes por la noche.
Esta semana, el ministro de Interior y Justicia venezolano, Diosdado Cabello, confirmó el arresto del suboficial de la Gendarmería Nacional Argentina, Nahuel Agustín Gallo, tras su ingreso al país.
Milei exigió su liberación inmediata y advirtió que agotarán todas las vías diplomáticas para devolverlo a su país.
Mientras, Gil sostuvo que el gendarme “se quiso infiltrar” en Venezuela y aseguró que “está siendo procesado con pleno respeto al Estado de Derecho y la justicia venezolana”.
“Dejen ya la desesperación y asuman las consecuencias de su conducta que avergüenza al noble pueblo argentino”, manifestó.
Gallo, de 33 años, ingresó desde Colombia a territorio venezolano a través del Puente Internacional Francisco de Paula Santander, para llegar al estado Táchira, de acuerdo con un comunicado conjunto de la cancillería y el Ministerio de Seguridad de Argentina.
La suegra del gendarme, Yalitza García, denunció que desconocen su paradero e insistió en conversación con la Voz de América en que viajó a Venezuela para encontrarse con su esposa e hijo, y posteriormente regresar juntos a Argentina.
Esta semana García acudió a la Dirección General de Contrainteligencia Militar (DGCIM) para averiguar si se encuentra en esa sede, pero no logró confirmarlo.
El arresto aumenta las tensiones entre Caracas y Buenos Aires, que la semana pasada denunció ante la Organización de Estados Americanos que el gobierno de Nicolás Maduro sigue hostigando a seis opositores asilados en su sede diplomática en Venezuela.
El fin de semana, a casi nueve meses de haber entrado en la residencia de la embajada de Argentina en Venezuela, los refugiados cercanos a la líder opositora María Corina Machado denunciaron en su primera conferencia de prensa virtual que enfrentan una situación de “alto riesgo”.
Alertaron que se encuentran en medio de una creciente incertidumbre, luego de que, de acuerdo con sus denuncias; el gobierno venezolano arreció un asedio policial contra la sede diplomática y cortó el suministro eléctrico y de agua potable.
Venezuela rompió relaciones diplomáticas con Argentina, después de que Buenos Aires cuestionara los resultados de las elecciones presidenciales del 28 de julio que le dieron la victoria a Maduro, y Brasil asumió su representación diplomática en Caracas.
Posteriormente el gobierno venezolano revocó la autorización a Brasil para representar los intereses de Argentina en su territorio.
El lunes, el gobierno colombiano exhortó a las autoridades venezolanas apegarse a los principios del Derecho Internacional, y reiteró que junto a Brasil ha ofrecido sus buenos oficios para “garantizar la protección y asumir la custodia” de la sede diplomática y brindar protección internacional a las seis personas.
Aunque no ha divulgado resultados disgregados, el Consejo Nacional Electoral (CNE) proclamó a Maduro ganador de los comicios presidenciales de julio para un tercer mandato, pero la oposición, que publicó copias de las actas que conservaron sus testigos de mesa, denuncia fraude y le atribuye el triunfo al excandidato Edmundo González Urrutia, exiliado en España desde septiembre.
Con información de la VOA