La sonda espacial Parker alcanzó esta semana un logro histórico al sobrevivir al paso más cercano al Sol, que se produjo a 6,1 millones de kilómetros de la superficie, mientras el vehículo se movía a una velocidad récord de 692.000 kilómetros por hora.
La sonda de la NASA reapareció tras haberse acercado al Sol y estableció comunicación con la Tierra. ”Parker transmitió una señal hacia la Tierra indicando que está en buenas condiciones y que funciona con normalidad”, hizo saber la NASA este viernes a través de un blog dedicado a las misiones que está permitiendo conocer el Sol como nunca antes. “Es lo más cerca que un objeto creado por el hombre ha estado alguna vez de una estrella. Está a salvo”, señaló la agencia en la red social X.
Durante su viaje por la corona solar, la capa más externa de la atmósfera del Sol, la sonda durante su encuentro cercano aceleró a 690.000 kilómetros p or hora, más rápido que cualquier nave espacial que haya volado jamás.
La señal fue recibida por los coordinadores de la misión del Laboratorio de Física Aplicada Johns Hopkins, en Maryland, en la noche entre el 26 y el 27 de diciembre, después de 48 horas de espera.
A las 8.53 (hora argentina) del 24 de diciembre, la sonda Parker alcanzó el punto de mayor acercamiento al Sol, convirtiéndose así en el objeto artificial más cercano a una estrella y el más veloz. Como referencia, el planeta más cercano al Sol, Mercurio, se encuentra a 58 millones de kilómetros de la estrella, y la sonda estuvo a 6,1 millones de kilómetros.