Un innovador estudio realizado en Caracas revela que el SARS-CoV-2, el virus responsable de la pandemia de covid-19, se encontraba presente en las aguas residuales de la ciudad, lo que proporcionó una herramienta para monitorear la propagación del virus.
Publicada en la revista Scientific Reports, la investigación confirma que el análisis de aguas residuales puede ser un sistema eficaz de alerta temprana y permitiría identificar tendencias de infección antes de que los casos se reporten oficialmente.
El estudio, realizado entre septiembre de 2021 y julio de 2023, detectó concentraciones significativas de ARN viral en muestras de aguas residuales tomadas de distintas parroquias de Caracas.
Catia y Caricuao, zonas clave en el estudio
Zonas como Catia y Caricuao, que presentaron altos índices de infección, mostraron niveles elevados de virus.
Los resultados indicaron una correlación entre la concentración del virus en las aguas residuales y el número de casos confirmados de covid-19, lo que respalda la idea de que la vigilancia de aguas residuales puede complementar los métodos tradicionales de diagnóstico.
Una de las principales conclusiones del estudio es que la vigilancia de aguas residuales puede detectar picos de infección hasta seis días antes del reporte oficial de los casos.
Este hallazgo, señala la revista, resalta el potencial del monitoreo ambiental para anticipar brotes y permitir a las autoridades de salud pública tomar decisiones más informadas y oportunas.
Según los investigadores, la presencia del SARS-CoV-2 en las aguas residuales puede reflejar con precisión el nivel de circulación del virus en la comunidad, incluso en áreas con pocos casos reportados.
El análisis también reveló que factores como el pH y la turbidez de las aguas residuales afectan la cantidad de virus detectado.
Esto sugiere que condiciones específicas del ambiente podrían influir en la estabilidad y propagación del virus en el sistema de alcantarillado.
SARS-CoV-2 en aguas residuales de Caracas: análisis potencial pero limitado
A pesar del potencial demostrado del análisis de aguas residuales como herramienta de vigilancia epidemiológica, el estudio también identifica algunas limitaciones en la metodología.
La recolección de muestras directamente del sistema de alcantarillado, sin un tratamiento adecuado, puede afectar la precisión de los resultados.
Además, la falta de infraestructura de tratamiento en la ciudad y la variabilidad en el suministro de agua pueden influir en la calidad de las muestras y en la interpretación de los datos. No obstante, los investigadores son optimistas sobre las posibilidades futuras.
Estiman que, a medida que se perfeccionen los protocolos de análisis y se mejore la infraestructura de recolección, la vigilancia de aguas residuales podría convertirse en una herramienta esencial no solo para detectar covid-19, sino también otras enfermedades infecciosas emergentes y reemergentes.
Este enfoque, conocido como Epidemiología Basada en Aguas Residuales, ha demostrado ser una estrategia valiosa en diversas partes del mundo. Su implementación en Venezuela podría contribuir a anticipar futuros brotes y mejorar la respuesta a pandemias.
Con información de El Nacional