El ministro de Seguridad Pública de Costa Rica, Mario Zamora, informó que los 200 migrantes asiáticos deportados desde Estados Unidos que llegarán a Costa Rica este jueves «no representan ningún problema para la seguridad».
En conferencia de prensa semanal, Zamora, junto con el presidente de Costa Rica, Rodrigo Chaves, indicaron que las 200 personas deportadas, entre ellos 50 niños, estarán en el país entre cuatro y cinco semanas mientras son procesadas para enviarlos a su lugar de origen.
«Todas las personas que llegarán al país ya pasaron por filtros de seguridad en Estados Unidos, no se trata de criminales y no representan ningún problema para la seguridad del país», afirmó Zamora.
El ministro también explicó que se utilizarán fondos de la embajada de Estados Unidos en Costa Rica, así como de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), quienes serán los encargados de coordinar todo el proceso de llegada y salida de los migrantes deportados.
«Nosotros somos colaboradores cercanos de Estados Unidos, otros países han sufrido más. Ayudaremos a recibir a 200 migrantes de Uzbekistán, Pakistán, Kazajistán, Kirguistán, países de Asia central y de la India. Ayudaremos con 200 que serán enviados, nos ayudan a procesarlos y con todo pago estarán en el puesto unas semanas y después Estados Unidos los manda en aviones a su país», dijo el presidente Chaves.
EFE