Luego que el pasado sábado fueran deportados a El Salvador 238 venezolanos presuntamente vinculados al Tren de Aragua, varias voces de familiares han alzado su voz denunciando que algunos de los migrantes son inocentes.
En redes sociales se conoció la historia de un joven que llegó al país centroamericano en uno de los vuelos provenientes de Estados Unidos para ser recluido en una cárcel de máxima seguridad.
Sebastián García Casique denunció que su hermano fue apresado en Norteamérica por solo tener tatuajes y llevado a El Salvador acusado de pertenecer a la temida banda criminal.
“Nunca había estado preso, nunca ha cometido un delito ni acá en Venezuela ni en ningún otro país”, expesó el ciudadano en su cuenta en Instagram donde también publicó una fotografía de su familiar esposado.
Indicó que la única falta que cometió fue entrar ilegalmente a Estados Unidos.