El presidente Nicolás Maduro arremetió este miércoles contra un sector de la oposición venezolana, al que calificó como «extremista», asegurando que está “derrotado” y “agotado” políticamente.
En un mensaje publicado en su cuenta de Telegram, el mandatario acusó a la oposición de «no respetar las reglas democráticas ni la convivencia institucional».
“Hay un sector extremista de la oposición que está derrotado; ellos no han respetado las reglas de la convivencia y la democracia”, afirmó Maduro.
“Están agotados”, insistió, acusándolos de actuar con la intención de “borrar toda la institucionalidad venezolana”.
Según el presidente, cada vez que ese grupo ha decidido participar en procesos electorales, lo ha hecho, a su juicio, con fines «desestabilizadores». “Cuando han participado, lo hacen para generar disturbios, guarimbas, insurrecciones o desconocer los resultados”, sostuvo.
En este sentido, defendió la línea oficialista, asegurando que el chavismo «ha logrado mantenerse firme en su hoja de ruta, la cual, según él, «ha sido validada por la voluntad popular»
“Nosotros, con gran vigor, hemos conseguido el camino, ratificado por el pueblo, para avanzar hacia la paz y la estabilidad de toda Venezuela”, concluyó.
Contexto
Estas declaraciones surgen tras las elecciones parlamentarias y regionales del pasado 25 de mayo, en las que la Plataforma Unitaria Democrática (PUD) decidió no participar, alegando la «falta de condiciones democráticas mínimas». Denunciaron «irregularidades en la convocatoria, ausencia de garantías y el control institucional ejercido por el oficialismo sobre el Consejo Nacional Electoral (CNE)».
Sin embargo, otros actores opositores sí optaron por medirse en los comicios, como el exgobernador de Miranda, Henrique Capriles Radonski, y el gobernador saliente del estado Zulia, Manuel Rosales, del partido Un Nuevo Tiempo (UNT). Ambos argumentaron que votar era una forma de «resistir y castigar al gobierno en las urnas».
Capriles, quien estuvo inhabilitado políticamente durante 15 años por la Contraloría General de la República, fue habilitado semanas antes de las elecciones, lo que le permitió postularse como candidato a la Asamblea Nacional. Resultó electo el pasado domingo junto a otros dirigentes como Luis Emilio Rondón, Henri Falcón y Stalin González.
Por su parte, Manuel Rosales, quien aspiraba a la reelección como gobernador del estado Zulia, no logró conservar el cargo. Tras su derrota, aseguró que fue su “profundo amor por la tierra zuliana” lo que lo llevó a competir.
De acuerdo con los resultados oficiales publicados por el CNE, el Gran Polo Patriótico obtuvo una amplia mayoría en las elecciones legislativas, al adjudicarse 253 de los escaños de la Asamblea Nacional, lo que representa el 83,42 % del Parlamento.
En el caso de las gobernaciones, el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV) ganó 23 de las 24 gobernaciones. La oposición solo obtuvo la Gobernación del estado Cojedes, con Alberto Galíndez, mientras que el chavismo recuperó tres: Zulia, Nueva Esparta y Barinas.