El ayatolá Ali Jamenei, líder supremo de Irán, aseguró que su país infligió un duro revés a Israel y Estados Unidos durante el reciente conflicto, en su primera aparición pública desde el alto el fuego del martes.
En un mensaje televisado, Jamenei afirmó que el «régimen sionista estuvo a punto de caer de rodillas» y acusó a Washington de recibir «una bofetada» por su intervención.
El clérigo de 86 años advirtió que Irán responderá a cualquier nuevo ataque con acciones contra bases militares estadounidenses en Oriente Medio, citando como precedente el ataque iraní a la base de Qatar durante el conflicto.
«Este hecho podría repetirse si nos agreden», declaró, enfatizando que cualquier ofensiva tendría un «alto costo» para EE. UU.
Sus palabras responden a las declaraciones del presidente Donald Trump, quien días antes había calificado a Jamenei como «blanco fácil» y exigió la «rendición» de Irán, algo que el líder iraní tildó de «humillación inaceptable».
Disputa nuclear y tensiones
Jamenei desvinculó el conflicto reciente del programa nuclear iraní, señalando que el verdadero objetivo de EE. UU. es la «sumisión política» de su país. «Ya no hablan de enriquecimiento o misiles, sino de rendición», afirmó, rechazando las advertencias de Trump sobre posibles nuevos ataques si Teherán reactiva su programa atómico.
El mensaje, grabado en un lugar no revelado —tras reportes de que Jamenei se refugió en un búnker en Lavizan durante los bombardeos—, reiteró la postura iraní de resistir presiones externas.
El discurso llega tras un cese al fuego mediado por Trump, quien sugirió evitar el «caos» de un cambio de «régimen» en Irán.