La noche de este miércoles se reportó un incremento en el número de funcionarios y vehículos policiales en los alrededores de la residencia de Andreína Baduel, activista de derechos humanos e hija del general fallecido Raúl Isaías Baduel, en Caracas.
Baduel, quien también es hermana del preso político Josnar Adolfo Baduel, ha denunciado que está siendo víctima de un patrón sistemático de acoso, hostigamiento y vigilancia, presuntamente ejecutado por agentes del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (CICPC) por órdenes del ministro del Interior y Justicia, Diosdado Cabello.
Desde hace varios días, la joven activista ha alertado sobre la presencia constante de patrullas frente a su vivienda, cuyos efectivos hacen sonar sirenas a toda hora como forma de intimidación y tortura psicológica. Esta situación ha generado preocupación en su comunidad, donde viven niños, adultos mayores y otras familias que también se sienten amenazadas por la presencia policial.
Baduel se ha consolidado como una de las voces más activas en la defensa de los presos políticos venezolanos, y ha señalado directamente al régimen de Nicolás Maduro por violaciones sistemáticas a los derechos humanos.