Neiyerver León Rengel, el venezolano que demandó al Gobierno de EE. UU. por 1,3 millones de dólares luego de que lo deportaran a El Salvador, señaló que decidió llevar adelante ese proceso en los tribunales, ya que lo que desea es que «arreglen su vida», pues sostiene que lo perdió «todo» al violársele el debido proceso cuando lo detuvieron y expulsaron del país.
En una entrevista a Telemundo, el criollo resaltó que no es un delincuente y mucho menos forma parte de un grupo criminal.
«No somos delincuentes, no somos parte de una banda delictiva. Estas son mis armas (se refiere a sus implementos de trabajo), soy barbero y de verdad lo único que quiero es que todo esto acabe. Yo lo que quiero es que arreglen mi vida por completo, que borren mi nombre de toda esa lista», narró.
El venezolano se mostró confiado de que la demanda contra la administración de Donald Trump proceda. Considera que las autoridades migratorias actuaron ilegalmente en su caso.
Por su parte, Domingo García, director de la Liga de Ciudadanos Latinoamericanos Unidos, que acompaña al criollo en la demanda, expresó su indignación por lo que le hicieron al venezolano. «Eso ni lo va a recompensar. Estuvo cuatro meses en la cárcel de El Salvador. Fue torturado, abusado. Su familia no lo pudo encontrar por más de un mes», precisó.
Telemundo consultó al Departamento de Estado en torno a esta demanda. Sin importar pruebas, la diplomacia estadounidense insistió en que León Rengel forma parte del Tren de Aragua.
«Este extranjero ilegal fue considerado una amenaza a la seguridad pública por ser un miembro confirmado del Tren de Aragua, y se procedió a removerlo de Estados Unidos», apuntó.
Contexto del caso
El pasado jueves, León Rengel inició el procedimiento para demandar a EE. UU. por haberlo deportado al Centro de Confinamiento del Terrorismo (Cecot) en El Salvador, considerando que su detención y traslado fueron «erróneos».
De acuerdo con The New York Times, el criollo estuvo cuatro meses en la cárcel de máxima seguridad. Allí, comentó León Rengel, recibió golpes y maltratos. Por eso, el 24 de julio presentó una denuncia administrativa ante el Departamento de Seguridad Nacional, acusando a las agencias de inmigración de Estados Unidos de sacarlo del país sin el debido proceso.
En esencia, Leon Rengel reclama a la administración norteamericana 1,3 millones de dólares por daños y perjuicios. Este hombre quedó en libertad la semana antepasada a raíz del canje de prisiones entre Venezuela y EE. UU., por lo que actualmente vive en su país de origen.
“Yo quiero limpiar mi nombre”, dijo en una entrevista por teléfono con ese medio la noche del miércoles desde su casa en Miranda. “Yo no soy una mala persona”, agregó.
Además, la Liga de Ciudadano subrayó que espera presentar otras decenas de denuncias a nombre de sujetos también enviados al Cecot