La Fiscalía General de Colombia informó que un adolescente de 17 años se entregó voluntariamente a las autoridades, por su presunta participación en el atentado contra Miguel Uribe Turbay, precandidato presidencial.
De acuerdo con El Universal de Colombia, el ente acusador dijo que se investigaba al joven por «su presunta participación en una de las reuniones de planeación del ataque perpetrado el pasado 7 de junio en Bogotá» contra Uribe.
En ese sentido, la Fiscalía agregó que el adolescente «suscribió compromiso voluntario de ampliar interrogatorio». Esto, con el fin de entregar «más información detallada» sobre el atentado que mantiene al senador y precandidato presidencial en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) de la Fundación Santa Fe.
Se conoció además que el joven quedó bajo medida de protección por parte del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF).
Días atrás, la Fiscalía General radicó oficialmente una acusación contra el adolescente de 15 años, señalado de dispararle a Uribe Turbay en un acto de campaña.
“La Fiscalía presentó ante el Centro de Servicios Judiciales para adolescentes, el escrito de acusación contra el adolescente quien habría disparado contra el precandidato presidencial Miguel Uribe y que fue vinculado a este caso, por los mismos delitos de González Ardila. Se está a la espera que se fije fecha para audiencia de formulación de acusación por parte del juez de conocimiento”, precisó la entidad.
El complicado proceso se presentó ante el Centro de Servicios Judiciales para Adolescentes. Dicha autoridad tiene competencia para casos que involucran a menores de edad en delitos.
Uribe Turbay, quien opta por la candidatura presidencial dentro del Partido Centro Democrático, fue víctima de un atentado el 7 de junio en el parque El Golfito, de Modelia, Bogotá, donde recibió tres impactos de bala, dos en la cabeza y uno en la pierna.
El autor material del ataque es un menor de edad, detenido en el lugar cuando estaba armado con una pistola Glock 9 mm.
Desde el suceso, a Uribe se le han llevado a cabo varias cirugías, incluida una neuroquirúrgica, y ha mostrado indicios de mejoría, como disminución del edema cerebral, aunque su estado se mantiene como “grave” y “crítico”.
El atentado generó alarma nacional y ha reavivado el temor a la violencia política en Colombia, especialmente en vísperas de las elecciones presidenciales de 2026. El presidente Gustavo Petro suspendió un viaje oficial y respaldó las acciones de las autoridades, mientras que la Fiscalía señaló posibles vínculos de fuerzas de seguridad con el ataque.