Chevron y Valero Energy trabajan para reanudar el suministro de crudo venezolano a las refinerías estadounidenses de Valero, en virtud de un acuerdo que permanecía en pausa, según informaron a Reuters tres fuentes cercanas a los preparativos.
De acuerdo con una nota firmada por las periodistas Marianna Parraga y Arathy Somasekhar, mientras Chevron espera que Petróleos de Venezuela (Pdvsa) asigne los cargamentos previstos para agosto, la compañía y Valero negocian los detalles del acuerdo, incluida la reactivación de una operación de transferencia barco a barco frente a Aruba.
Una de las fuentes consultadas indicó que la operación de carga de Valero en aguas cercanas a Aruba podría reanudar actividades este mismo mes, una vez concluidas las inspecciones obligatorias y cerrados los contratos de buques actualmente en negociación.
En el primer trimestre del año, antes de que se revocara la licencia de Chevron para operar en Venezuela, la empresa suministró unos 50.000 barriles diarios (bpd) de crudo pesado venezolano a las refinerías de Valero desde Aruba, según datos de transporte citados por la agencia.
Ese volumen representó aproximadamente el 20 % de las exportaciones totales de petróleo venezolano de Chevron en ese periodo.
Reuters destacó que este acuerdo de suministro es clave para Petroboscan, la segunda mayor empresa conjunta de Chevron en Venezuela, debido a las limitaciones para almacenar el crudo pesado Boscan producido por ese proyecto. Dichas limitaciones han obligado en el pasado a reducir la producción.
Caso Chevron
El pasado 24 de julio, Nicolás Maduro confirmó que la petrolera estadounidense Chevron recibió una licencia para continuar sus operaciones en Venezuela.
“Efectivamente, la empresa Chevron fue informada de la concesión de licencias para seguir sus operaciones en Venezuela. Ellos informaron a la vicepresidenta ejecutiva, Delcy Rodríguez”, declaró Maduro en una entrevista concedida al canal multiestatal TeleSur.
Al ser consultado sobre si esta concesión está relacionada con la liberación de los 252 migrantes venezolanos que se encontraban detenidos en una cárcel de máxima seguridad en El Salvador, el mandatario se limitó a responder: “No comment”.
Maduro señaló que, mientras la situación de Chevron “estuvo en ese limbo en Estados Unidos”, los pozos petroleros que opera en conjunto con el Estado venezolano incrementaron su producción.
“Deben saber que en estos meses (…) Venezuela ha crecido un 12 % en la producción petrolera con esfuerzo propio. Por eso siempre he dicho que nosotros no necesitamos licencia para operar. Hemos aprendido a seguir nuestro propio camino; poquito a poquito se llega lejos”, afirmó.
Más detalles sobre la licencia
Días después, Reuters reveló que Chevron recibió una licencia restringida para operar en Venezuela. Tres fuentes cercanas a la decisión aseguraron que los ingresos derivados de las ganancias petroleras no serán transferidos a la administración de Nicolás Maduro.
La autorización, emitida de forma privada, permitiría a la compañía tomar decisiones dentro de sus empresas conjuntas y participar en adquisiciones y pagos de contratos, según revelaron dos fuentes con conocimiento del asunto.
No obstante, dado que no están permitidos los pagos a Venezuela —incluidas regalías e impuestos obligatorios—, se desconocía si Pdvsa asignaría cargamentos de crudo a Chevron con destino a Estados Unidos. Tampoco estaba claro si algún otro socio de la estatal venezolana había recibido una autorización similar.
En febrero pasado, el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció que las licencias serían revocadas y dio a las empresas petroleras plazo hasta finales de mayo para completar sus transacciones.
La portavoz del Departamento de Estado de EE. UU., Tammy Bruce, aseguró el pasado martes que Washington no permitirá que los ingresos del petróleo financien o beneficien al Gobierno venezolano.
“Lo que hemos dicho repetidamente es que no permitiremos que los ingresos del petróleo financien o beneficien al Gobierno (venezolano). Y creo que eso es algo que podemos repetir aquí en este momento”, declaró Bruce ante la prensa.
Por su parte, Natalia Molano, portavoz en español del Departamento de Estado, también afirmó ese martes que la administración de Donald Trump “está siendo mucho más directa y coherente en sus acciones” hacia Venezuela.
“El Gobierno estadounidense está haciendo todo lo posible, con herramientas y medidas contundentes, para cerrar cualquier flujo de recursos y de dinero al Gobierno de Maduro”, dijo Molano en entrevista con la emisora W Radio de Colombia.
Consultada sobre la autorización otorgada a Chevron, Molano explicó que el Departamento del Tesoro es el encargado de administrar las licencias a empresas estadounidenses en el extranjero. Al igual que Tammy Bruce, reiteró que ninguna medida que se apruebe “va a terminar lucrando” a la administración venezolana.
“Esas fueron las direcciones. No podemos hablar de los detalles de la licencia, pero sí podemos decir que la política es que ninguna licencia puede lucrar al Gobierno de Maduro”, sentenció.
Además, el sociólogo y director de Datanálisis, José Antonio Gil Yepes, adelantó que la nueva licencia “no sería publicada”, ya que, “según la Oficina de Control de Activos Extranjeros (OFAC), se trata de un documento de carácter privado”.
A pesar del hermetismo, Gil Yepes aseguró en su cuenta de X (antes Twitter) que Chevron “ya está operando en el país”.
El retorno de Chevron ha sido valorado positivamente por sectores económicos venezolanos. La Cámara Venezolana de Comercio Electrónico (Cavecom-e) calificó el reinicio de operaciones como un “hito significativo” que permitirá revitalizar las cadenas productivas y fomentar nuevas alianzas de inversión en el país.