El subsecretario se Estado de EE. UU., Christopher Landau, aclaró que su país no tiene planes de derrocar a Nicolás Maduro y que es deber de los venezolanos «reclamar su libertad».
En una entrevista con Donald Trump Jr., en el podcast ‘Triggered’, Landau remarcó que, aunque podrán ayudar con algunas medidas, la salida de Maduro es labor de la población venezolana.
«Creo que el aumento de la recompensa por la cabeza de Maduro a 50 millones de dólares… Creo que la designación de su cartel como organización terrorista extranjera, envió un mensaje inequívoco», señaló, ante la creencia de un sector de que EE. UU. se lanzaría por el líder chavista. «Creo que en los próximos días y semanas se verán más acciones que transmitirán mensajes», agregó, anticipando más acciones.
En ese sentido, precisó que el pueblo venezolano «tiene que alzarse y reclamar su libertad». «Creo que uno de los problemas que hemos visto en el mundo es que si la gente no gana su libertad, no la aprecia… (los Estados Unidos) no podemos ir por el mundo cambiando gobiernos a nuestro antojo. Sin duda, podemos intentar tomar medidas para defender nuestros intereses y crear las condiciones para que la gente de varios países (Venezuela, uno de ellos) tome las medidas adecuadas (para cambiar a sus gobiernos)», subrayó.
«Pero, en definitiva, creo que nos hemos dado cuenta con Irak y Afganistán que no se puede permitir que Estados Unidos se lance a otro país y tome las riendas», insistió el subsecretario de EE. UU.
Acto seguido, Trump Jr. reconoció que el cambio de régimen no ha sido exitoso en la política exterior estadounidense en décadas recientes. A eso, Landau respondió: «Correcto. Por eso nos oponemos firmemente a los cambios de régimen, en cuanto a que Estados Unidos sea el principal impulsor».
«Creo que, ya sabes, sin duda podemos colaborar con elementos democráticos en varios países. Apoyamos la democracia. Pero, en última instancia, si nos fijamos en nuestra propia revolución, (los estadounidenses) ganamos nuestra libertad», dijo.
Finalmente, dijo esperar con ansias «el día en que se restablezca el orden constitucional en Venezuela».
Sobre la recompensa
El pasado 7 de agosto, la fiscal general de Estados Unidos, Pam Bondi, anunció que el Gobierno de Donald Trump aumentó a 50 millones de dólares la recompensa por información que conduzca a la detención de Nicolás Maduro.
Bondi acusó a Maduro de “utilizar organizaciones terroristas extranjeras” como el “Tren de Aragua” y el “Cártel de Sinaloa” para presuntamente “introducir drogas letales y violencia” en Estados Unidos.
“Hasta la fecha, la DEA ha incautado 30 toneladas de cocaína vinculadas a Maduro y sus cómplices, de las cuales casi siete toneladas están vinculadas al propio Maduro, lo que representa una fuente fundamental de ingresos para los cárteles con sede en Venezuela y México. La cocaína suele estar mezclada con fentanilo, lo que ha provocado la pérdida y destrucción de innumerables vidas estadounidenses”, añadió.
Asimismo, Bondi afirmó que el Departamento de Justicia de EE. UU. ha incautado más de 700 millones de dólares en “activos vinculados a Maduro”, incluyendo dos aviones privados, nueve vehículos y otros bienes. “Es una amenaza para nuestra seguridad nacional. Por lo tanto, hemos duplicado su recompensa a 50 millones de dólares”, agregó.
En enero de este año, la Administración de Donald Trump había aumentado la recompensa por información que condujera a la captura de Maduro, de 15 a 25 millones de dólares, en respuesta a lo que calificó como una investidura presidencial “ilegítima”.
En ese momento, el gobierno estadounidense también ofreció una recompensa de 25 millones de dólares por información sobre el ministro de Interior, Justicia y Paz, Diosdado Cabello, y de 15 millones por el ministro de Defensa, Vladimir Padrino López.
Con información de El Cooperante