El Gobierno de Argentina exigió este viernes, «de forma categórica e inmediata», la liberación de un gendarme argentino detenido de manera «arbitraria e injustificada» por las fuerzas de seguridad de Venezuela.
Un comunicado conjunto de la Cancillería y el Ministerio de Seguridad argentinos expresó el «más enérgico rechazo ante la detención arbitraria e injustificada del suboficial de la Gendarmería Nacional Argentina, Cabo Primero Nahuel Agustín Gallo, por parte de las autoridades venezolanas».
Según detallaron las autoridades argentinas, el 8 de diciembre pasado, Gallo ingresó al territorio de Venezuela desde Colombia, a través de un paso fronterizo terrestre, y cruzó el Puente Internacional Francisco de Paula Santander, para dirigirse al estado (región) venezolano de Táchira, con el único propósito de visitar a su familia y a su pareja, con quien comparte un hijo en común.
Pese a la naturaleza estrictamente personal de su visita, Gallo «fue detenido de manera inmediata, sin motivo legítimo alguno y en abierta violación de sus derechos fundamentales», señaló el Gobierno argentino.
«Argentina no tolerará actos de esta naturaleza contra sus ciudadanos y deplora este tipo de prácticas que contravienen los principios esenciales del respeto a la libertad individual y la dignidad humana», advirtió en el comunicado.
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El gobierno de Javier Milei agregó que «Argentina actuará con toda firmeza en todas las instancias y ante todos los organismos internacionales para exigir la inmediata liberación del suboficial detenido».
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, también le advirtió a Maduro en su cuenta de X: «Cada minuto que lo retengas va a ser un paso más hacia tu propio fin».
Los diplomáticos argentinos fueron expulsados de Venezuela, en respuesta a que el gobierno de Milei desconoció los resultados de las elecciones presidenciales del 28 de julio pasado, que dieron como ganador a Maduro.
