Edmundo González Urrutia celebró la canonización aprobada este martes por el papa Francisco del beato venezolano José Gregorio Hernández Cisneros, quien, según el opositor, enseñó al país caribeño que, en «los momentos más difíciles», la fe es su «mayor fortaleza».
«¡Un día histórico para Venezuela! Hoy la esperanza se fortalece en el corazón de nuestro pueblo», expresó González Urrutia en X, donde compartió una imagen del conocido como el ‘Médico de los pobres’ (1864-1919), quien será el primer santo de la nación suramericana.
El opositor, en el exilio desde septiembre del año pasado, describió la vida de Hernández Cisneros como un «testimonio de bondad, servicio y entrega a los más necesitados».
«Que este acontecimiento renueve nuestra confianza en un futuro mejor para Venezuela. Sigamos adelante con fe y esperanza», agregó el exembajador, quien reclama la victoria en los comicios presidenciales de julio del año pasado, en los que el organismo electoral, controlado por rectores afines al chavismo, proclamó la controvertida reelección de Nicolás Maduro, quien juró para un tercer mandato este enero.
Diversos políticos y partidos de oposición también celebraron la canonización, entre ellos, el dos veces candidato presidencial Henrique Capriles, quien destacó el «legado de entrega y servicio a los más necesitados» de Hernández Cisneros.
Para la exdiputada Delsa Solórzano, es un día histórico en el que Venezuela -que vive una crisis política tras las presidenciales- «recibe una luz de esperanza» en medio de «las dificultades».
«Su vida, de fe, dedicada a servir, atender y sanar a los más necesitados es un gran legado que nos inspira a seguir adelante. Que su intercesión sane a nuestra Venezuela, nos fortalezca en estos tiempos difíciles y nos guíe hacia una nación de justicia, libertad y bienestar para todos», expresó.
El papa Francisco -hospitalizado en el hospital Gemelli de Roma debido a una neumonía bilateral- firmó el decreto durante la visita que le hicieron el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, y el sustituto de la secretaría de Estado, el venezolano Edgar Peña Parra.
La beatificación de Hernández Cisneros, el 30 de abril de 2021, se produjo después de que Francisco reconociera el milagro concedido a la niña Yaxury Solórzano Ortega, quien recibió un disparo en la cabeza durante un asalto mientras se encontraba con su padre y a quien los médicos que la atendieron habían desahuciado.
El suceso ocurrió en marzo de 2017, en el estado de Guárico (centro), cuando la pequeña tenía 10 años. Después de que los médicos que la atendieron dijeran a sus padres que la niña iba a fallecer, su madre rezó a José Gregorio para su curación, razón por la que, según la versión de sus familiares, avalada por al papa, se salvó.
La Iglesia católica venezolana también celebró este martes como histórica la canonización, que considera un «motivo de celebración para todos» los ciudadanos de este país. EFE