Estados Unidos exigió este lunes a las autoridades de Georgia investigar las supuestas irregularidades en las elecciones parlamentarias del pasado sábado, en las que ganó el partido gobernante Sueño Georgiano en medio de acusaciones de fraude por parte de la oposición.
«El pueblo georgiano acudió a las urnas el sábado en un ambiente electoral marcado por prácticas del partido gobernante que incluyen el mal uso de los recursos públicos, la compra de votos y la intimidación de los votantes», denunció el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, en un comunicado.
Según la Administración de Joe Biden, esto «contribuyó a crear condiciones desiguales y socavó la confianza pública e internacional en la posibilidad de que los resultados fueran justos».
Por ello, el portavoz de la diplomacia estadounidense anunció que su país se suma «a los llamamientos de los observadores internacionales y locales para que haya una investigación completa» sobre las supuestas irregularidades.
Según los datos oficiales, Sueño Georgiano, del primer ministro Irakli Kobajidze, cercano al Kremlin según la oposición, ganó las elecciones con más del 53 % de los votos.
Tanto la presidenta de Georgia, la europeísta Salomé Zurabizhvili, enfrentada al primer ministro, como los cuatro bloques opositores han rechazado los resultados.
Las relaciones entre el Gobierno georgiano y Occidente se encuentran afectadas desde la aprobación este año de la Ley sobre la Transparencia de la Influencia Extranjera, que la oposición georgiana considera semejante a la aprobada en Rusia para reprimir a la sociedad civil.
El portavoz del Departamento de Estado subrayó este lunes que el 80 % de los georgianos quieren que su país se integre en la Unión Europea (UE) y en la OTAN.
Por ello, Miller instó al Gobierno georgiano a que se comprometa con el proceso de reforma para entrar en la UE, derogando su «legislación antidemocrática».
«No descartamos mayores consecuencias si el Gobierno georgiano no cambia esa situación», advirtió.
Tras la aprobación de la polémica ley, la UE, Estados Unidos y el Reino Unido congelaron los programas de cooperación con Georgia.
La UE, que congeló las negociaciones de ingreso con Georgia, ha llamado a las autoridades locales a investigar las presuntas «irregularidades» detectadas durante la votación y el escrutinio.
El Kremlin acusó hoy a fuerzas externas -en alusión a Estados Unidos y la UE- de intentar desestabilizar la situación en la nación caucásica al poner en cuestión la limpieza de los comicios. EFE