El ministro de Relaciones Exteriores de Colombia, Luis Gilberto Murillo, manifestó este martes 29 de octubre que su país mantiene la postura de exigir a la administración de Nicolás Maduro la data desagregada de las elecciones presidenciales del 28 de julio que sustenten el anuncio del CNE sobre la victoria del mandatario venezolano, situación que es cuestionada por varios países de la comunidad internacional.
Así lo señaló Murillo en Cali, donde se lleva a cabo la COP16 y recordó que el planteamiento inicial con Brasil y México es que sería importante que presentaran las actas del proceso electoral y constitucional «que tiene Venezuela en su autonomía», por lo que destacó que no se han cambiado de postura al respecto.
El canciller colombiano recibió a su par venezolano, Yván Gil, para que participe de la cumbre climática. De acuerdo con el diario El Tiempo, ambos sostuvieron un encuentro donde tuvieron una postura conjunta sobre la defensa de la biodiversidad, el titular de la cartera de Exteriores visitante defendió el triunfo de Maduro.
«A nosotros nos importa la posición de los venezolanos respecto a Venezuela, que es la posición de avanzar y reelegir a Nicolás Maduro. Hoy se cumplen tres meses de esa fabulosa elección», dijo Gil.
La postura de Colombia acentúa un escenario internacional en el que se evidenció la «derrota» de Maduro en los Brics luego de que Brasil vetara su ingreso. A pesar de las críticas proferidas por varios funcionarios contra la nación amazónica y su presidente, Luiz Inácio Lula da Silva, el jefe de Estado venezolano responsabilizó a funcionarios dentro de la Cancillería que serían afines al expresidente Jair Bolsonaro y que esperaría que su par brasileño se pronunciara.
Celso Amorim, asesor especial del presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, manifestó el jueves 24 de octubre que Venezuela no ingresó a los Brics -debido al veto de la nación amazónica- no porque haya un tema democrático de por medio, sino porque hubo «abuso de confianza» ya que «nos dijeron algo y no se hizo», lo que calificó de «grave».
«No es un problema de régimen político, es una cuestión de abuso de confianza. Actuamos de buena fe, pero con Venezuela se rompió la confianza», señaló Amorim en declaraciones concedidas a O Globo, al tiempo que expresó el deseo de Brasil en que se «recupere la confianza» entre ambas naciones.
El asesor especial hacía referencia a la promesa que obtuvo desde el Palacio de Miraflores de que publicaría la data desagregada de la elección presidencial del 28 de julio, cosa que a casi tres meses de los comicios aún no se ha cumplido.