Familiares de pacientes recluidos en el Hospital Central de Maturín, en el estado Monagas, denunciaron las carencias del banco de sangre.
Este importante servicio no cuenta con reactivos desde hace más de dos meses ni tampoco materiales, como la bolsa para almacenar la sangre y que deben comprar en 15 dólares cada una.
Rosa Salazar (nombre cambiado para resguardar la verdadera identidad), quien tiene un familiar hospitalizado desde el pasado domingo, ha acudido dos veces al banco de sangre y la respuesta del personal ha sido la misma: «no hay reactivos». En su caso, requiere para su pariente sangre tipo ORH+, pero le manifestaron que no hay disponibilidad.
«Ayer, después de que me dijeron que no había reactivos, me quedé en el pasillo viendo cómo entraba la gente y salía con la misma respuesta.
El lunes le hicieron una transfusión de la última reserva disponible en el banco de sangre. Como tiene la hemoglobina baja debido a un sangrado que tiene, le mandaron a ponerle más sangre, pero no en vista de que no hay, no ha sido posible», expresó Salazar.
Aunque los familiares de los pacientes puedan conseguir los donantes, la sangre se recibe, pero se congela hasta que doten de los reactivos para poder procesarla. Vale señalar que al principal hospital de Monagas acuden personas de bajos recursos a quienes se les hace cuesta arriba costear los insumos que piden, como las bolsas y exámenes de laboratorio, en el caso de necesitar sangre.
En la parte privada, hay bancos de sangre donde cada bolsa cuesta 90 dólares, si el familiar lleva a la persona que va a donar, pero si no lo lleva, el costo asciende a 110 dólares.
Una ciudadana, que declaró en forma anónima para evitar represalias contra su familiar, contó que desde hace ocho días, ella y su hermana han tenido que dormir afuera en la emergencia, pues vienen de Tucupita. Su pariente, quien es funcionario, tuvo un accidente y presentó fractura en el pie, brazo y cráneo, y de la capital deltana fue remitido a Maturín, pues allá no contaban con los recursos suficientes.
«El gasto que hemos tenido ya perdimos la cuenta: solo entre una tomografía, rayos X y una placa 3D, gastamos más de 90 dólares, además de los gastos para trasfusión de sangre. Para eso lo hubiéramos llevado a una clínica y ya lo hubiesen operado. Gracias a Dios por un amigo, mi mamá, que es una persona mayor, se esta quedando en su casa. Ni hablar del trato por parte de los médicos y el personal de seguridad que tratan mal a la gente», indicó la ciudadana.
Criticaron al gobernador chavista, Ernesto Luna, quien según del régimen de Maduro es la segunda «mejor gestión del país», pero solo para embellecer plazas y apoyar eventos deportivos, mientras que la salud queda en un segundo plano, según las personas entrevistadas.
Con información de La Patilla