El Ministerio de Salud libanés reportó este sábado, en un informe preliminar recogido por medios locales, que al menos 31 personas murieron y 14 resultaron heridas tras «una ola de ataques» israelíes en el este y el sur del Líbano.
De acuerdo con información publicada por Al Jazeera y el medio libanés Al Manar, veinte personas murieron en la región de Baalbek-Hermel (este), incluidas 11 en la localidad de Knaissseh, y otras 14 personas resultaron heridas.
En el sur, continúa el reporte, al menos a 11 personas murieron tras la ofensiva israelí, seis rescatistas en la aldea de Deir Qanun, en la ciudad de Tyre, y cinco personas en la de Hanaway.
El Ejército de Israel, por su parte, informó en su canal oficial de Telegram del ataque a «sitios de infraestructura terrorista de Hizbulá en las áreas de Tyre y Baalbek», en el sur y este de Líbano, respectivamente.
«Entre los objetivos atacados se encontraban terroristas, apartamentos operativos e instalaciones de almacenamiento de armas», aseguraron las Fuerzas de Defensa de Israel (IDF).
El grupo libanés chií Hizbulá reivindicó también este sábado un total de 23 ataques con proyectiles y drones contra ciudades y asentamientos en el norte de Israel, y aseguró que aún tiene «suficientes misiles y aviones no tripulados» para continuar la guerra.
Al menos 3.160 personas han muerto en el Líbano desde el inicio del intercambio de fuego cruzado entre Israel y Hizbulá en octubre de 2023, en su mayoría después de que el Ejército israelí iniciara su campaña de ataques masivos contra el país árabe el 23 de septiembre pasado.
A la vez, la violencia ha provocado que más de 1,2 millones de personas se hayan visto obligadas a abandonar sus hogares, según datos difundidos por el Gobierno libanés.
Con información de EFE