Un sistema de tormentas que azotó amplias zonas del sur y el medio oeste de Estados Unidos causó al menos 16 muertes relacionadas con el clima hasta la madrugada de este domingo.
De acuerdo con información de AP, las alertas de tornados e inundaciones repentinas durante la noche prepararon un clima más severo. Según los meteorólogos, podría producirse crecidas en los cursos de agua durante los próximos días.
Muchas de las zonas afectadas ya se encuentran gravemente anegadas tras días de fuertes tormentas que generaron tornados mortales.
Además, se emitieron nuevas alertas de tornado en Alabama y Misisipi, junto con alertas de inundaciones repentinas para varios condados de Kentucky, Misisipi y Tennessee.
El sábado se produjeron más lluvias torrenciales e inundaciones repentinas que han azotado el centro de Estados Unidos, aumentando rápidamente las vías fluviales y provocando emergencias desde Texas hasta Ohio. De las 16 muertes reportadas desde el inicio de las tormentas, 10 de ellas se registraron tan solo en Tennessee.
El Servicio Meteorológico Nacional advirtió que docenas de lugares en varios estados alcanzaran lo que la agencia llama una «etapa de inundación importante», con posible inundación extensa de estructuras, carreteras, puentes y otra infraestructura crítica.
Muertes
Un hombre de 57 años falleció el viernes por la noche tras salir de un coche arrastrado por la corriente en West Plains, Misuri.
Asimismo, las inundaciones provocaron la muerte de dos personas en Kentucky; entre ellas un niño de 9 años, que fue arrastrado camino a la escuela. Asimismo, un hombre de 74 años cuyo cuerpo fue hallado el sábado dentro de un vehículo completamente sumergido en el condado de Nelson.
Un niño de 5 años también falleció en una vivienda de Little Rock, Arkansas, en un incidente relacionado con el mal tiempo, según la policía. No se proporcionaron detalles de inmediato.
Los tornados a principios de semana destruyeron barrios enteros y fueron responsables de al menos siete de las muertes.
El sábado hubo 521 vuelos cancelados y más de 6.400 vuelos retrasados dentro de Estados Unidos o que entraban o salían del país. FlightAware.com informó 74 cancelaciones y 478 retrasos de vuelos estadounidenses la mañana del domingo.
El comercio interestatal también podría verse afectado. Las inundaciones en centros de carga de Louisville, Kentucky, y Memphis podrían provocar retrasos en los envíos y la cadena de suministro.
El alcalde de Louisville, Craig Greenberg, dijo que el río Ohio subió 5 pies (aproximadamente 1,5 metros) en 24 horas y que continuaría creciendo durante días. «Esperamos que éste sea uno de los 10 eventos de inundación más importantes en la historia de Louisville», aseguró.
La amenaza de inundaciones repentinas se cierne sobre muchos estados
Las alertas de inundaciones repentinas y tornados continuaron emitiéndose el sábado en Arkansas, Misisipi, Tennessee y Kentucky, con más lluvias torrenciales y vientos destructivos. Todo el este de Kentucky estuvo bajo vigilancia por inundaciones hasta la mañana del domingo.
Cientos de carreteras en Kentucky quedaron intransitables debido a las inundaciones, árboles caídos o deslizamientos de lodo y rocas.
El centro de Hopkinsville, Kentucky, reabrió por la mañana después de que las aguas del río Little retrocedieran, dando un respiro muy necesario, pero aún se esperaban más lluvias, según el alcalde James R. Knight Jr.
«Recibimos un poco de lluvia, pero la mayor parte fue al norte de nosotros», afirmó Knight. «Gracias a Dios por eso. Nos dio un pequeño descanso».
En el centro-norte de Kentucky, los funcionarios de emergencia ordenaron una evacuación obligatoria para Falmouth, un pueblo de 2.000 habitantes en una curva del creciente río Licking. Las advertencias fueron similares a las de las inundaciones catastróficas de hace casi 30 años, cuando el río alcanzó un récord de 50 pies (15 metros), lo que resultó en cinco muertes y 1.000 hogares destruidos.
En Arkansas, los meteorólogos pidieron a la gente que evitara viajar a menos que fuera absolutamente necesario debido a las inundaciones generalizadas.
BNSF Railway confirmó que un puente ferroviario en Mammoth Spring fue arrasado por las inundaciones, lo que provocó el descarrilamiento de varios vagones. No se reportaron heridos, pero no hubo una estimación inmediata de cuándo se reabriría el puente.
Desde el miércoles, más de un pie de lluvia (30,5 centímetros) ha caído en partes de Kentucky, y más de 8 pulgadas (20 centímetros) en partes de Arkansas y Misuri, dijeron los meteorólogos el sábado.
Los meteorólogos atribuyeron el clima violento a las temperaturas cálidas, una atmósfera inestable, fuertes cortantes de viento y abundante humedad proveniente del Golfo.
Al menos dos informes de tornados observados se registraron el viernes por la noche en Misuri y Arkansas, según el Servicio Meteorológico Nacional. Uno, cerca de Blytheville, Arkansas, elevó escombros a al menos 25.000 pies (7,6 kilómetros) de altura, según la meteoróloga del NWS Chelly Amin. La oficina de gestión de emergencias del estado reportó daños en 22 condados debido a tornados, vientos, granizo e inundaciones repentinas.
En Dyersburg, Tennessee, decenas de personas llegaron el sábado a un refugio cerca de una escuela pública bajo la lluvia, cargando mantas, almohadas y otras necesidades.
Entre ellos estaba George Manns, de 77 años, quien dijo que estaba en su apartamento cuando escuchó una alerta de tornado y decidió dirigirse al refugio. Solo unos días antes, la ciudad fue golpeada por un tornado que causó millones de dólares en daños.
«Agarré todas mis cosas y vine aquí», sostuvo Mann, quien llevó una silla plegable, dos bolsas de artículos de tocador, computadoras portátiles, iPads y medicamentos: «No los dejo en mi apartamento en caso de que sea destruido. Tengo que asegurarme de tenerlos conmigo».